Después de la segunda guerra mundial finalizada en el año de 1945, en lo
sucesivos años se inicio la llamada “Guerra fría”, donde las dos potencias
mundiales del momento Estados Unidos y la Unión Soviética no se enfrentaban en
una guerra militar convencional, si no que competían por ser uno superior al
otro en diferentes campos de la vida humana: científica, educativa, política,
ideológica, cultural, deportiva y hasta en lo tecnológico demostrando al mundo
quien era el mejor. El avance que tenían las dos en esa época era sin duda lo
máximo internacionalmente y una forma de demostrarlo era log
El 3 de
noviembre del año 1957, La Unión Soviética acertó un duro revés a los Estados
Unidos y del cual a estos le fue difícil digerirlo por un buen tiempo; “La
guerra fría” había llegado al espacio. Los soviéticos logran lanzar al espacio
sideral a el “primer ser vivo”; su nombre: “Laika”, ¿quien era?: Una perra, que
fue seleccionada de las calles de Moscú unas cuantas semanas antes, para ser
“el experimento inicial”, que buscaba a futuro como objetivo principal el
lanzamiento del primer ser humano a el espacio (caso que ocurrió en 1961).
La pequeña perra “Laika” no tuvo un entrenamiento
especial ya que las reducidas dimensiones de su cabina tampoco le permitirían
más que ponerse en pie o echarse. Se le implantaron unos electrodos para
registrar su respiración y también un sensor de pulso y presión sanguínea, la
perra estuvo metida allí por 3 días, desde el 31 de octubre en espera de su
lanzamiento. La cabina del Sputnik 2 donde estaba “Laika” tenía
sistema de calefacción que la mantendría a temperatura agradable no solo a ella
sino también a los equipos electrónicos de la nave espacial; la alimentación de
la perra días antes y durante el lanzamiento se basó en un “gel especial” de
alta nutrición que sería su comida en el espacio.
Al momento de que fue lanzado al espacio el Sputnik 2 con
la perra adentro se sabía que el satélite no estaba creado tecnológicamente
para separarse del cohete portador, el sistema de refrigeración no funcionó
como estaba previsto y la cabina empezó a recalentarse casi desde la misma
entrada en órbita, Llegando a registrar más 43ºC de calor. Al paso de unas
cuantas horas, el animal sucumbía, probablemente a causa de un síncope por
hipertermia. Su nave quedo viajando por el espacio por unos 5 meses mas con el
cuerpo de “Laika” en su interior, antes de desintegrarse en la atmósfera entre
el mar Caribe y América del Sur en Abril de 1958.
Durante
mucho tiempo se creyó públicamente la historia de que “Laika” falleció sin
dolor alguno una semana después de estar en orbita al agotarse el oxigeno de la
nave, pero realmente no fue así, la perrita murió pocas horas después del
despegue, producto del pánico que subió aceleradamente su presión sanguínea y
por el sobrecalentamiento de la nave.
“Laika”
es la única perra que fue lanzada al espacio sin sistema de retorno, pero
tampoco es la única que ha muerto en el espacio, ya que en el año 1960 seria
lanzado por la Unión Soviética el Sputnik 5-1, ya para esa fecha dotada de
sistema de retorno a la tierra y que en su interior estaban 2 perras: Chaika y
Lisichka que murieron al estallar unos cuantos segundos después de haberse
hecho el lanzamiento, producto de un grave error técnico.
Quien lo pudiera pensar que un insignificante animalito daría el
histórico primer pasó para el avance del hombre más allá de nuestro planeta
tierra, logrando al transcurrir del tiempo alcanzar el espacio, llegar a la
luna y posiblemente en un futuro cercano pisar el planeta Marte; por
eso “Laika” sin duda es: la primera Heroína espacial.
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