NOTICIAS GLOBALES

lunes, 26 de marzo de 2018

EEUU dice estar listo para una guerra comercial con China, pero Pekín tiene con qué responder

                               El secretario del Tesoro de Estados Unidos, Steven Mnuchin, declaró que Washington no teme una guerra comercial tras las medidas aplicadas por el presidente Donald Trump. Sin embargo, China tiene en su arsenal muchas herramientas con las que podría contestar, considera Wang Wen, decano ejecutivo del Instituto Chongyang de Estudios Financieros.

"Nosotros estamos dispuestos a proceder con los aranceles, estamos trabajando en eso. Como dijo el presidente Trump, nosotros no tememos una guerra comercial, pero no es nuestro objetivo", declaró Mnuchin en una entrevista a la cadena Fox News después de que Donald Trump firmara un memorándum dirigido contra la supuesta agresión económica de China.

El documento prevé introducir aranceles del 25% a las importaciones —valoradas en 60.000 millones de dólares— de más de 100 tipos de bienes procedentes de China.
Wang Wen, decano ejecutivo del Instituto Chongyang de Estudios Financieros, afirmó que Washington no teme en vano. Según Wen, Pekín tiene varios ases bajo la manga que podría usar en respuesta.
"China está esperando, ya que sabemos perfectamente que la ventaja sobre el enemigo se obtiene después de que este golpee primero", aseveró Wang Wen, citado por el periódico ruso RBK.
La decisión de Trump de introducir tarifas arancelarias es una declaración de guerra comercial a China, sostuvo Wei Jianguo, ex vice ministro de Comercio de China.
"Trump tiene que entender que es una idea muy mala y [en esta guerra] no habrá ganadores, así como no habrá buenos resultados para las dos naciones", declaró Wei Jianguo, citado por Bloomberg.
En los próximos días la Casa Blanca publicará la lista final con los bienes que serán afectados por la nueva medida de Trump. Según la información publicada, esta lista incluirá productos de los sectores que fueron calificados de estratégicos en el plan del desarrollo de China 'Made in China 2025' (Producido en China 2025), como la industria aeroespacial, las tecnologías de información y la maquinaria.
¿Cómo puede responder el 'dragón' asiático?
El Ministerio de Comercio de China anunció que introduciría aranceles a las importaciones de EEUU valoradas en 3.000 millones de dólares como primera contramedida. Tarifas arancelarias del 25% se impondrán a los suministros de carne de cerdo y aluminio reciclado (valoradas en 2.000 millones de dólares) y las importaciones de tuberías de acero, las frutas, las frutas secas, las nueces, los vinos y el alcohol desnaturalizado (estimadas en 977 millones de dólares) se gravarán con el 15%, reza el comunicado publicado por el ente.

Además, Pekín decidió llevar el problema ante la Organización Mundial de Comercio (OMC). En particular, para responder a la introducción de tarifas a las importaciones de aluminio y acero, China introdujo una demanda contra EEUU. De acuerdo con las reglas de la OMC, el país asiático podrá introducir aranceles a las importaciones estadounidenses a partir del 1 de abril, fecha en la que culminan las consultas con EEUU.
"Es sorprendente, pero la respuesta de China ha sido discreta lo que apunta a la posibilidad de que posteriormente Pekín aplique medidas más duras. China, como el tercer exportador más grande del mundo, la economía que crece más rápido y el principal poseedor de bonos del Tesoro de EEUU tiene más palancas de influencia sobre el país norteamericano de lo que los políticos en Washington son capaces de reconocer", aseguró a Bloomberg Stephen Roach, presidente no ejecutivo del banco Morgan Stanley en Asia.
De acuerdo con Bloomberg, los aranceles chinos pueden implementarse a los bienes producidos por seis sectores que integran la economía de EEUU: la agricultura, las empresas tecnológicas, los artículos de consumo, la construcción aérea, los servicios y la educación. Anualmente, China importa de EEUU bienes y servicios por un valor de 140.000 millones de dólares.
En el sector agropecuario norteamericano, Pekín podría gravar con aranceles los suministros de granos de soja, sorgo, alfalfa y cerdos vivos. Por ejemplo, en 2017 China importó de EEUU soja por un valor de 14.600 millones de dólares.
Además, China puede utilizar la estrategia que la UE quería aplicar contra EEUU, cuando se supo que Washington quería introducir nuevos aranceles a las importaciones de acero y aluminio, escribe el periódico ruso RBK. En aquel entonces, Jean-Claude Juncker, presidente de la Comisión Europea, declaró que el bloque europeo podría imponer tarifas a las importaciones de las motocicletas Harley Davidson, de los pantalones Levi's y del whiskey borbón.
Según el medio ruso, las restricciones de China podrán ser aplicadas al sector de servicios. En 2017, EEUU registró un superávit en el comercio de servicios con China, valorado en 38.500 millones de dólares. Los mayores ingresos fueron obtenidos gracias a los viajes de los chinos en el país norteamericano que gastaron allí 32.000 millones de dólares. Con todo eso, según el medio ruso, China podrá limitar el número de estudiantes chinos que estudian en las universidades estadounidenses.
China también puede privar a las empresas estadounidenses del acceso a su mercado de contrataciones públicas valorado en 3.100 millones de yuanes (más de 490.000 millones de dólares). Esta medida afectará a empresas como Boeing y Cisco. Además, Pekín podría poner obstáculos para la entrada de las empresas estadounidenses en China a través de medidas que involucren a las aduanas, el control de calidad, los servicios antimonopolios y la protección del medio ambiente.

No hay comentarios:

Publicar un comentario